Flatpak 1.14 es la última versión de la utilidad de despliegue de software encargada de gestionar el formato de paquetes del mismo nombre y de ofrecer un marco que permita hacer funcionar aplicaciones de manera que, al menos en un principio, sean independientes de la distribución, aunque hay componentes como PipeWire o el propio Flatpak que pueden limitar características o la instalación de las aplicaciones si no se usan unas versiones mínimas de estos.
Los nuevos lanzamientos de Flatpak no suelen aportar cosas revolucionarias, pero siempre suponen un paso hacia a delante. En esta ocasión lo que sobresale es una experiencia de usuario más pulida mediante la línea de comandos, ya que a partir de la versión 1.14 es posible usar el argumento -u como un alias de --user.
Continuando con más cosas de la interfaz de línea de comandos (CLI), esta se encarga a partir de este lanzamiento de informar correctamente al usuario sobre qué aplicaciones están utilizando extensiones del entorno de ejecución que han llegado a su fin de ciclo, tiene en cuenta las operaciones de transacción pendientes cuando se imprime un mensaje de fin de ciclo, además de que el comando de desinstalación solicita confirmación antes de eliminar entornos de ejecución o extensiones de un entorno de ejecución.
Flatpak 1.14 ha incorporado el reconocimiento de la opción --socket=gpg-agent por parte de flatpak run y sus comandos relacionados y permite que los subsandboxes posean nombres de MPRIS en el bus de sesión. Las políticas de SELinux han sido actualizadas para cubrir los enlaces simbólicos en /var/lib/flatpak y se ha corregido un fallo que se reproducía cuando un fichero .desktop no tiene la clave Exec = en el momento de ser procesado por el comando build-export. Lo último mencionado se suma a otras correcciones aplicadas al manejo de los ficheros .desktop.
Flatpak es el formato de aplicaciones universales de referencia y el predilecto de Red Hat, Fedora, openSUSE, SUSE y Valve sobre todo cuando se trata de sistemas operativos inmutables orientados al escritorio, área en la que se encarga de reforzar la función de separar las aplicaciones del sistema operativo. Además, es una tecnología estrechamente ligada a GNOME y systemd, si bien ninguno de ellos son dependencias que impidan utilizarla sobre otros entornos de escritorio y otros inits.
Recordamos que los permisos y muchas de las características de las aplicaciones en formato Flatpak pueden ser gestionadas con Flatseal, un gestor gráfico que lo pone fácil a la hora de poner limitaciones o habilitar alguna que otra característica avanzada o especial.
Fuente: Muy Linux